Muere un menor de 15 años en Ceuta tras recibir un disparo en la cabeza
Un menor de sólo 15 años ha fallecido en la madrugada de este sábado en el Hospital Universitario de Ceuta tras de recibir al menos un tiro en la cabeza. El suceso ha ocurrido en las inmediaciones de la barriada del Príncipe Alfonso, cuando circulaba en una motocicleta junto a otro joven.
El joven fue trasladado desde el Puente del Quemadero, donde se produjo el disparo, en un coche particular hasta el centro sanitario, ubicado a menos de un kilómetro de distancia, en estado «muy grave» y murió pocas horas después, según han confirmado fuentes sanitarias a Europa Press.
La Jefatura Superior de la Policía Nacional mantiene abierta una investigación sobre el suceso, del que se ha negado a proporcionar cualquier información «para poder llegar al esclarecimiento de lo acontecido».
El presidente de la asociación de vecinos de la barriada del Príncipe, Abdelkamil Mohamed, ha condenado el suceso y se ha preguntado «cuántos crímenes más debemos sufrir para darnos cuenta del dolor que causamos… En pleno mes sagrado de Ramadán la comunidad se desconcierta y se horroriza por desgracias como esta». «Queremos», ha reclamado, «paz, tranquilidad y que nuestros jóvenes florezcan, que sean hombres justos y de provecho, que no caigan en el mundo de la delincuencia y los malos vicios».
Cárcel
En otro oredn de cosas, la Policía Nacional detenía el pasado 2 de abril en Melilla a individuo cuando se preparaba para lanzar diez bellotas de hachís envueltas junto a una piedra al interior de la cárcel.
Según ha informado a Europa Press un portavoz de la Jefatura Superior de Policía, la intervención ha sido desarrollada por policías del Grupo de Delincuencia Urbana de la Brigada Provincial de Policía Judicial durante una de las rondas de control efectuadas en los alrededores del Centro Penitenciario de la ciudad, en prevención de los lanzamientos de droga y objetos que ocasionalmente se producen al interior de los patios de prisión, precisamente cuando se encuentran allí los internos.
Los agentes observaron un vehículo con dos ocupantes en su interior que hacían maniobras extrañas, por lo que procedieron a su intercepción.
El portavoz ha indicado que nada más detener el coche, el varón que ocupaba el lugar del acompañante descendió del mismo y emprendió la huida a pie en dirección opuesta al sentido en el que circulaban, al tiempo que portaba en la mano derecha un paquete cuyo envoltorio era de cinta adhesiva de color negro. Poco antes de darle alcance, el sujeto se deshizo del paquete lanzándolo al techo de un edificio, de donde fue recuperado.